En la Iglesia podemos decir que desde los inicios el Espíritu Santo ha suscitado la consagración de la vida al Señor, comenzando con las vírgenes. A lo largo del tiempo, el Espíritu Santo ha ido
suscitando diversidad de carismas y de formas de consagrarse a Dios, que en nuestros días se sigue desarrollando.
Aquí te presentamos esta realidad de la vida consagrada que se da en nuestra parroquia, y que puedes visualizar de forma más detallada en este apartado.
Son cuatro las comunidades religiosas que están presentes actualmente: la comunidad contemplativa de las monjas Trinitarias, la comunidad de los padres franciscanos de la TOR, la comunidad de las
religiosas de la Consolación y la comunidad de las hermanitas de los ancianos desamparados.
Todas ellas son una riqueza para nuestra parroquia, y por las que tenemos que rezar y colaborar.